No es ninguna exageración afirmar que los ojos del mundo están puestos en el comportamiento de las criptomonedas en general, por lo que la presión sobre este mercado es mucho mayor que hace apenas un puñado de años atrás. Esto conlleva, lógicamente, nuevos desafíos y riesgos a tener en cuenta antes de comenzar a invertir. ¿Qué rol juega lo que ocurren en Rusia? ¿Será el 2022 el año de la gran regulación cripto? ¿La minería está puesta en jaque? Todo lo que debes saber, a continuación
Si todo el mundo se encuentra hablando de las criptomonedas, eso tendrá una consecuencia bastante obvia: las presiones y desafíos también mutarán y se acrecentarán más. En ese sentido, el 2022 ya no es un año más para Bitcoin ni para el resto del ecosistema cripto. Ya sea para comprar Ethereum, invertir en monedas estables o apostar a un desarrollo blockchain, conviene tener en cuenta algunos de los siguientes puntos.
En primer lugar, la volatilidad de Bitcoin y otras monedas digitales es una constante. Lo que ha cambiado es su relativa autonomía del contexto internacional: si comparaos lo ocurrido en marzo del 2020, con el comienzo de la pandemia a nivel global, su rendimiento apenas se vio afectado. Dos años después, con la explosión de su rendimiento en el medio, el conflicto bélico en Ucrania parece haber demostrado un cambio: Bitcoin ahora se mueve un poco más emparejado junto al resto de los mercados financieros.
Gran parte de la explicación de este fenómeno se puede encontrar en la cantidad de inversores: en apenas dos años la cifra de personas que invierten en criptomonedas ha crecido de forma exponencial, llevando consigo estrategias y reacciones propias de otros mercados: así, quienes están acostumbrados a vender ante situaciones extremas, también lo harán en el sector cripto, al menos en un principio.
Por otro lado, la mayor regulación por parte de gobiernos y bloques regionales es un desafío clave en este 2022. Durante los años previos, muchos países cambiaron su matriz impositiva para adecuarse a las criptomonedas y poder alcanzarlas por la ley. Ahora, lo que se debate es un marco regulatorio mucho más amplio: Estados Unidos, sin ir más lejos, anunció recientemente una ley que busca controlar y regularizar a las criptomonedas en su país. La Unión Europea también acaba de votar la ley final, aunque no sin polémica de por medio.
En relación a ese último aspecto, la controversia en este 2022 podrá verse en lo que a la actividad minera se refiere: muchos países buscan limitar o restringir la actividad de usuarios que minan criptomonedas debido a su alta demanda energética. De hecho, la ley discutida en Europa estuvo muy cerca de incluir un artículo de ese calibre. Potencias como China ya tomaron ese tipo de medidas, mientras que otros países buscan incentivar energías alternativas y más saludables con el planeta.
Sin dudas, en diciembre de este año podremos hacer un balance general de todo lo ocurrido para saber si Bitcoin logró superar estas pruebas.